Llevas unos días viendo frente a tí, ese extraño universo que te pertenece. Sí, son tuyas, la tienes pegaditas a tí. Son tus manos. Las haces girar y las admiras como si fueran mágicas. Fijas la vista cuando se mueven y parece que tienen sabor a chicle, pues invariablemente aterrizan dentro de tu boca, alojándose ahí por largos ratos. Poco a poco descubres para qué sirven...
Agarran (sonajas, trapitos, orejas, el cabello de mamá...)
Entretienen (tu vista, la mía...)
Golpean (tus cachetes, los muñecos...)
Son tuyas y de a poco irás descubriendo que útiles son.
3 comentarios:
Me ganaste el post! Ale también se mira las manos, fascinada.
Un abrazo,
Lu
Que bonito blog!
Apenas caí en la cuenta del comentario que me dejaste hace tiempo y me encuentro la sorpresa de este botoncito tan lindo.
Gracias por la visita!
Que lindo... y de ahora en adelante no para... ya empezó la etapa de Todo a la boca y dicen que dura muchoooooo.
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